El medio ambiente es algo que nos preocupa a todos, es por eso que en nuestra lucha para poder ayudar al ecosistema nos hemos ido reinventando con la composición de cada aparato. Los transformadores encapsulados con resina epóxica se han venido diseñando y fabricando con un mayor tamaño y potencia, aumentando hasta en un 35% su productividad y disminuyendo el mantenimiento. Sigue leyendo para conocer un poco más de este beneficio líquido viscoso que ayuda al cuidado del hábitat. 

¿Qué es la resina epóxica?

También llamada  “epoxi”, “porcelanato” o “cristal líquido”. Es conocida por las cualidades adhesivas que posee, por lo que es un producto muy útil en la industria. Pero ¿Qué es exactamente? Pues, es un polímero termoestable que se endurece cuando es mezclado por un catalizador o endurecedor. Generalmente, es encontrado como un líquido viscoso y es muy usado en materiales compuestos reforzados con fibras u otras aplicaciones. No obstante, al ser un derivado del petróleo, resulta necesario hacerlo pasar por varios procesos para conseguir un estado sólido. 

Ventajas a nivel industrial

La resina epóxica puede ser utilizada en la industria debido a que su composición lo dota de varios beneficios. Algunos de ellos son su gran dureza, brillo y transparencia. Esto lo convierte en un material que ayuda a proteger las bases de toda clase de aparatos. Otros de ellos que podemos rescatar a nivel industrial son:

  • Alta resistencia térmica. Tiene resistencia a extremas temperaturas, pues soporta prolongadas exposiciones entre 45º C a 70º C. Por lo que, sí es directamente trabajado a este ambiente tan alto, no perderá sus propiedades. 
  • Fácil aplicación y limpieza. Es de una consistencia flexible, adherente y húmeda, lo que le permite a la resina epóxica  tener una gran habilidad para poder poder ser de fácil manejo. Una vez seco y en material sólido, se puede limpiar fácilmente. 
  • Gran resistencia a la corrosión. Otra de sus ventajas es que también cuentan con gran soporte al estar en contacto con agentes químicos corrosivos. Volviéndolo un elemento que mantiene sus resistencia por tiempo prolongado. 
  • Muy polivalente. Además de su aplicación para distintos productos, pueden ser vista en otros campos diferentes como la decoración, bisutería, la industria aeronáutica y la electrónica. Siendo así muy moldeables. 

¿Qué puedes encontrar en ITESA?

Como parte de nuestra política de trabajo, en ITESA trabajamos con los mejores materiales del mercado para fabricar transformadores de calidad a base de resina epóxica. Esa dedicación por ofrecer mayor seguridad y reflejar confianza hacia nuestros clientes nos ha llevado a trabajar en todo tipo de variantes en busca de aquella versión capaz de cumplir con la agenda social: el factor medioambientalista. Es así como surgió el transformador de corriente encapsulado en resina. 

Este producto es utilizado para poder medir la intensidad sin interrumpir las líneas de corriente. Su fabricación está compuesta de alambres esmaltados de alta calidad, lo que logra permitir un flujo continuo de energía. Además, el espacio y diámetro tiene las medidas correctas que permiten el ingreso del conductor de corriente. Sus principales ventajas se pueden dividir en tres puntos claves que ayudan al medio ambiente a la instalación:

Reducción del impacto medioambiental

La construcción de estos transformadores encapsulados en resina permite que sean capaces de respetar al medio ambiente. Esto lo vuelve especial pues la máquina al terminar su vida útil, normalmente se tendría que desechar. Sin embargo, se convierten en elementos inactivos y las bobinas, tanto primaria como secundaria, que se encuentran en el interior pueden ser recicladas. Otro de los puntos resaltantes es que, a comparación de los que usan líquido aislante, cuentan con menos posibilidades de incendiarse. 

También son capaces de reducir las emisiones de dióxido de carbono. Si se realiza un cálculo estimado, se estarían reduciendo 112 toneladas de CO2 en 20 años solo con estos productos hablando estrictamente de manera industrial. Esta ventaja es importante en la atmósfera, pero también supone un gran alivio económico en diferentes lugares donde se realizan y ejecutan leyes para disminuir la emisión de estos gases. A la larga, terminan convirtiéndose en el mejor aliado para diferentes rubros. 

Fáciles de instalar y uso flexible

Contrario de los transformadores bañados en aceite, los encapsulados en resina no exigen construcciones costosas como: fosos de recogida, rejillas de extinción y cortafuegos de separación para prevención de fuego, entre otras. Gracias a ello, y a la ausencia de líquidos refrigerantes, pueden ser instalados en edificios o lugares cerca de personas o zonas más cercanas a cargas, con la ventaja de poder ahorrar los costos de conexión y reducir pérdidas en el suministro. Además claro, de contar con la resina epóxica dentro de sus componentes, lo que lo dota de todas sus ventajas. 

Además, cuentan con un bajo costo de mantenimiento porque su revisión periódica consta de evitar la acumulación de polvo o suciedad. Esto es un diferenciador clave con los transformadores de aceite, ya que requieren más revisiones para poder tener un control del líquido aislante y verificar que no se hayan cambiado las propiedades. Asimismo, tienen gran resistencia a una sobrecarga mayor, por lo que son aptos para alimentar cargas con corrientes de arranque frecuentes.

Transformador encapsulado en resina epóxica para media tensión

A diferencia de los modelos anteriores, estos están elaborados y diseñados para poder disminuir el impacto ambiental, la emisión de ruido y el riesgo de incendio. Además, cuentan con menores costos de instalación y mantenimiento, lo que los vuelven una inversión duradera y segura. Comúnmente, pueden ser colocados en edificaciones, hoteles, casas, empresas industriales, hospitales o reducciones. 

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